Es cierto, Honda me tiene enganchado con sus publicistas. Los considero unos pobres esclavos del siglo XXI.
De otra forma es imposible que exista en una sola empresa tanto nivel de exprimida de coco para conseguir mantenernos con el símbolo de la H entre ceja y ceja.
http://youtu.be/QrsoZeD5Nyw
Cada vez que me asomo a sus ventanas me asombro con nuevas propuestas como la de hoy. Un nuevo diseño del trineo de Santa Claus. Creo que en esta ocasión les faltó un par de latigazos con el de siete puntas pero el de las de bolas de acero con pinchos, pues reformar el trineo, y no sustituir a los renos por algo más en la «honda» actual, es pecado. Basar toda su inventiva en unos trazos para mantener prácticamente igual el trineo con la única inclusión de la gran H como novedad, se merece cuando menos un estirón de miembros en el torno o potro que decía la Santa Inquisición que para estos casos debería existir aún a día de hoy.
Pero el remate es hacer las pruebas de las normas de seguridad Euro NCAP sin los renos. Honda, eso no. Los renos tienen que ir en la prueba y entonces ¿que será del pobre Rudolf & friends?
A ver, dímelo, estoy esperando. Una desgracia, eso es lo que será. Una des-gra-cía.
Hay que trabajar un poco más, que para sustituir un trineo con 75.000 millones de kilómetros tampoco hace falta tanto departamento de diseño, si el resultado es tan pobre. Otra cosa es que Papá Noel sea bueno de conformar y admita pulpo como animal de compañía.
Mañana más. Sed buenos.